martes, 8 de diciembre de 2009

La Musica Cofradiera que nos une

Este largo puente de la Inmaculada nos ha permitido bañarnos en el rio de los sones semanasanteros, de las cornetas y tambores de siempre, de este y otro lugares.

El desfile de miles de musicos, con sus respectivas bandas, aparte de un esfuerzo inedito y por el que hay que felicitar a los organizadores, junto con el amplio abanico de conciertos, te deja una sensacion especial. Es el triunfo de la entrega y la confianza, de la apuesta de la gente, joven sobre todo, por una pasion, una tradicion, una forma de amar la musica.

Estamos hartos de ver chavales tirados en los parques de los pueblos y ciudades, entregando horas muertas a la nada, sin aliciente de ningun tipo. Precisamente por eso, cuando veo a esos jovenes luciendo orgullosos sus uniformes, apretando pulmones con sus cornetas, redoblando sus tambores con ahinco, hay que quitarse el sombrero.

La musica cofradiera consigue eso tan dificil hoy dia de unir, de aunar voluntades, de dar a los jovenes un motivo para esforzarse, para aprender, para compartir, para dar lo mejor de si mismos.

Un servidor, que es tremendamente critico con los "frentes trompeteros", con los que olvidan que lo importante son los Sagrados Titulares y no lo que suena tras de ellos, con los que caen en excesos y sobreactuaciones, no deja de alabar de corazón a todos y cada uno de los musicos que llenan su tiempo libre, y mas alla de ese tiempo, robando a sueño o familia, para que cada primavera la musica se escriba con mayusculas.

Por eso tambien es muy triste que haya Consistorios que no sepan valorar este entramado de ilusiones y de entrega. Pero eso es otra historia con pies de barro.

Hoy toca enviar un abrazo a quienes luchan cada dia porque tras los pasos de nuestra Semana Santa, suene la musica mas hermosa.

No perdais nunca la ilusion. Que Dios y su Bendita Madre os lo premien.