lunes, 8 de enero de 2007

Ochenta y pico dias

Las suelas todavia se pegan al suelo por acumular restos de ilusion en forma de caramelos que hemos ido pisando por los suelos de la geografía del recuerdo, de la infancia y de la magia de los que vinieron de Oriente.

El "día despues" nos devuelve de bruces a tanta realidad, a las cajas vacias amontonadas, a los quehaceres y menesteres, a la normalidad que creiamos perdida, y que nos empeñamos en ponerle tonos grises y aires de melancolía y hasta de disgusto.

Y sin embargo, Jesús, el que vimos nacer en Nochebuena en esa celebración entrañable y de memoria antigua que es la Misa del Gallo, ya no nos deja. Los cofrades esbozamos hoy una sonrisa contenida.

Ochenta y pico días hermanos no son nada. ¿Que han empezado las Rebajas? Lo que se abre es la veda para soñar. Hoy sabes que en lontananza hay un brillo de horizonte en forma de convocatoria de cultos, de tardes que se alargarán, de boletín dejado en tu buzón que cuando lo abres trae en las paginas del centro las fechas para sacar tu papeleta, de programas de radio que vuelves a escuchar y parece que suena como nunca, de musica, de imágenes, de sonidos y de amistades que hablan y no paran de aquella calle que no me pienso perder este año, o aquella marcha en la revirá por la noche....

Calzate las sandalias de la cuesta de enero, y recorre con esperanza los días. Siente la intensidad de lo que llega. Es grande. Es hermoso. Es tuyo. Y al final del camino, una Cruz de Guía anunciara nuestra Fe.

Que poco falta.